viernes, 23 de noviembre de 2007

¿Sueñan los frikis con películas reestrenadas?

Pues sí, para qué negarlo...

Por fin he podido disfrutar de mi película favorita en todo su esplendor. Pantalla inmensa, cómodo butacón y palomitas rancias injustificablemente caras. Lo que viene siendo ir al cine...

Estos días se puede ver Blade Runner en varios cines por vaya usted a saber qué extraña razón. Lo mismo me da que sea por el 25º aniversario del estreno original, o por promocionar el lanzamiento de las chorrocientas mil versiones diferentes de la película en DVD o como revancha personal de Ridley Scott (ese director de quien Gasset dijo con toda la razón del mundo que no es que sea irregular, sino que simplemente es malo) contra la humanidad en general por no haber sabido apreciar la película en el momento de su estreno... Éche o mesmo, o sea, whatever...

El caso es que aquéllos que en 1982 no pudimos disfrutar de esta joya en en una sala de cine bien por ser demasiado jóvenes, bien por tener una venda en los ojos que nos impidiera reconocer una obra maestra aún cuando ésta estuviera delante de nuestras narices, hemos sido agasajados con una nueva oportunidad para poder gozar esta maravilla del cine negro (que no ciencia ficción, señora) en la gran pantalla.

La versión estrenada ahora es el enésimo montaje (he perdido la cuenta ya de cuántos van), con imagen restaurada y en versión original subtitulada para poder apreciar en su magna extensión el acentazo holandés de Rutger Hauer. Este montaje, titulado The Final Cut (¿"final"?, ¿por qué mienten?), es a grandes rasgos el Director's Cut del año 1992 sometido a un lavado de cara con mínimas variaciones. No hay voz en off, aparece la controvertida secuencia onírica de Deckard soñando con un unicornio y el final no es el que se vio en los cines en 1982.

En mi humilde opinión el montaje del director es bastante mejor que la chapuza que se estrenó originalmente en los cines. Sí, he dicho chapuza. Brillante y genial, pero una chapuza al fin y al cabo. Cualquiera que conozca mínimamente la historia que hay tras esta película estará de acuerdo con esto. El guión se cambiaba constantemente, el equipo odiaba al director, los protagonistas se odiaban entre sí, la voz en off se introdujo con calzador narrada desganadamente por un Harrison Ford totalmente hastiado del proyecto, un final improvisado tras las malas críticas de los pases previos.. Es increíble que de ahí saliera nada bueno.

El montaje del director corregía muchos de esos errores. Eliminó la odiosa voz en off que acribillaba al espectador con explicaciones innecesarias, tratándole como un idiota. Además al eliminar la voz en off la película es mucho más silenciosa, parca en palabras, con lo que se consigue que el ambiente sea aún más opresivo, inquietante y (últimamente utilizo demasiado esta palabra) sórdido. Pero principalmente descartó ese ñoño final que tan poco pegaba con la historia y que te dejaba en el cuerpo una sensación de "aquí hay algo que no encaja".

En fin, una ocasión que los fans de Blade Runner no podemos dejar pasar. Siempre es un privilegio el poder disfrutar de tu película favorita en una sala de cine. Yo, desde luego, salí encantado. Incluso volvería a verla un día de estos si mi cartera no estuviese al borde de la muerte...

4 comentarios:

Roi dijo...

que envidia me das ;-) me enteré tarde aunque se que no es disculpa, hubo un tiempo en que no me la perdería. Un gran clásico que en pantalla grande debe de ser prodigioso.
De lo ultimo que he visto recomiendo Promesas del Este. De lo mejorcito de cine de gangsters que he visto en mucho tiempo.
Saludos.

KaRMe dijo...

La has visto en el cine en Galicia?? Dime que si dime que si... dímelo para ir corriendo...

Lis dijo...

Pues no, la he visto en Madrid. Rebusca por la cartelera gallega a ver si hay suerte...

KaRMe dijo...

He llegado aquí por tu perfil de anobii... y me había hecho ilusiones de ir a pontevedra o vigo... Creo que me tendré que conformar con el sofá de mi casa :)